El estreñimiento es un trastorno caracterizado por deposiciones infrecuentes o duras o dificultad para defecar. También conocido como irregularidad, el estreñimiento puede incluir dolor al defecar, incapacidad para "ir al baño" tras intentarlo durante más de diez minutos o no defecar después de más de tres días.
Los hábitos y pautas de cada persona son diferentes, por lo que lo que se considera "normal" varía de una persona a otra. Algunas personas sanas pueden no defecar todos los días; otras pueden tener heces especialmente blandas o duras (otro término para referirse a las deposiciones) pero no tener problemas para evacuarlas.
Preguntas frecuentes
El estreñimiento suele estar causado por no comer suficiente fibra o beber suficiente agua, por falta de actividad física o por retrasar el momento de ir al baño cuando se siente la necesidad. El estrés, los viajes u otros cambios en su rutina también pueden interferir en el funcionamiento normal del intestino. Las enfermedades intestinales, como el síndrome del intestino irritable, la disfunción del suelo pélvico, ciertos medicamentos, el embarazo, las enfermedades neurológicas, los problemas de salud mental o afecciones como una tiroides poco activa o la fibrosis quística, también pueden ser factores contribuyentes.
Beba mucho líquido, siga una dieta rica en fibra, haga ejercicio con regularidad y no espere a ir al baño cuando sienta ganas de defecar. Si estás en silla de ruedas, no puedes levantarte de la cama o no puedes hacer ejercicio por otros motivos, cambia de postura a menudo y haz ejercicios abdominales y elevaciones de piernas, si es posible (un fisioterapeuta puede recomendarte ejercicios específicos adecuados para ti).
Hay varios remedios que puedes probar: ablandadores de heces con docusato sódico, laxantes a granel, como el psilio, o supositorios o laxantes suaves, como el aceite mineral o la leche de magnesia. Ten cuidado si eliges laxantes, ya que durante largos periodos de tiempo puedes volverte dependiente de ellos.
Los enemas sólo deben utilizarse en casos graves.
Un estreñimiento repentino con calambres abdominales e incapacidad para expulsar gases o heces puede indicar una obstrucción intestinal, que es muy grave. En esta situación, no tome ningún laxante y llame inmediatamente a su médico.
Aunque no es tan grave como una obstrucción, debe ponerse en contacto con su médico lo antes posible si tiene dolor abdominal intenso e hinchazón, sangre en las heces, estreñimiento alternado con diarrea, heces finas como lápices, dolor rectal, pérdida de peso inexplicable o lleva varias semanas utilizando laxantes u otros tratamientos caseros sin obtener resultados.