La manometría anorrectal es una prueba que mide el rendimiento funcional del ano y el recto. Mediante un pequeño catéter y un globo con sensores, mide las presiones de los músculos del esfínter anal, la sensibilidad en el recto y los reflejos neurales necesarios para una defecación normal.

Preguntas frecuentes

Esta prueba suele recomendarse para evaluar a pacientes con disfunción intestinal generalizada. Puede tratarse de estreñimiento crónico o incontinencia fecal.

En algunos pacientes con estreñimiento crónico, los músculos del esfínter anal no se relajan adecuadamente al hacer fuerza o empujar para defecar. Esta función muscular anormal puede causar un tipo funcional de obstrucción. Los músculos que no se relajan al empujar hacia abajo pueden reentrenarse con técnicas de biorretroalimentación mediante manometría anal.

Además, la debilidad de los músculos del esfínter anal o la falta de sensibilidad en el recto pueden contribuir a algunos casos de incontinencia fecal. Si estas anomalías están presentes, pueden tratarse. Las técnicas de biorretroalimentación mediante manometría anal y ejercicios especiales de los músculos del suelo pélvico pueden fortalecer los músculos y mejorar la sensibilidad.

Se pondrá una bata de hospital y se le pedirá que se tumbe sobre el costado izquierdo. Se le introducirá suavemente en el recto un pequeño catéter flexible con sensores de presión y un globo en el extremo. Durante la prueba, el globo se inflará en el recto para evaluar las vías reflejas normales. La enfermera también puede pedirle que apriete, relaje y empuje en distintos momentos para medir los músculos del esfínter anal.

La prueba dura aproximadamente 30 minutos y es poco probable que cause dolor.

Se le pedirá que se administre un enema en casa el día de la prueba. Una enfermera le indicará la cantidad y el tipo de enema que debe utilizar. Además, no debe comer nada dos horas antes de la prueba.

A. Inmediatamente después de la prueba, podrá conducir hasta su casa y reanudar su actividad diaria normal. Es posible que reciba los resultados de la prueba inmediatamente después, o que su médico tenga que revisar los resultados y ponerse en contacto con usted al cabo de unos días. En función de los resultados, su médico puede recomendarle una terapia del suelo pélvico para fortalecer los músculos que sostienen la vejiga y el intestino.